vehentemente.

No tengo idea de lo que espero leer a lo que acabe de escribir, solo busco una forma de comunicación con mi yo interior y poder discutir las que cosas que he dejado hacer sin darme cuenta. Una cosa si es muy cierto Antonio, y es que el aburrimiento es un estado del alma, se marchita al no darle respiros y un poco de sol.


Desde hace tiempo no me siento bien, no me siento buen hijo, no me siento buen hermano, ni una buena pareja e indiscutiblemente no me siento buena persona; no me siento feliz con lo que ahora siento. Pienso y me pregunto ¿será posible que algo me falte? ¿Qué algo se haya pasado?, ¿perdido o peor aun que me lo haya hurtado?

¿Qué me ha cambiado? ¿Qué me ha sucedido? ¿Cómo hago para cambiar?

Ya la había dicho “la vida es dura y más cuando uno se da cuenta”... conozco el valor de esta estado de ánimo, me permite valorar más los buenos momentos y las buenas emociones; que por lo que nato empiezan a ser cada vez más escasas. No quiero hondar en los momentos malos y peores que he vivido, comprender que en este momento me es difícil estar bien, porque sencillamente no me siento bien.

Es que la reunión de situación que hacen que el alma delira, me convierten al algo amorfo.

Si… ¡el sueño acaba aquí!

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